1
EL LEVANTE MEDITERRÁNEO
UBICACIÓN GEOGRÁFICA
Se conoce como Levante Mediterráneo el espacio
geográfico del Asia occidental enmarcado de forma aproximada por Anatolia al
norte, Mesopotamia al noreste, el desierto de Arabia al este, la península del
Sinaí y Egipto al sur oeste y el mar Mediterráneo al oeste. En términos
generales es lo que históricamente se ha conocido como Siria Palestina y en
donde actualmente están asentados los países de Líbano, Siria, Palestina -
Israel y Jordania. Se incluye también a la isla de Chipre.
UNA CUESTIÓN DE NOMENCLATURA
En términos reales no sabemos cómo se autonombraban
de forma general los habitantes del Levante, es más factible que cada región
tuviese un nombre diferente que pudo haber cambiado a lo largo del tiempo.
Actualmente utilizamos las denominaciones cananeo–fenicio y amorreo–arameo como
una convención
académica para identificar a los habitantes del antiguo Levante
Mediterráneo. La diferencia entre ellas y el nombre como se las conoce más bien
han sido impuestas desde fuera. Le debemos a los acadios y sumerios nombrarlos
como amorreos, a los griegos haberlos englobado en el concepto de fenicios y a
la Biblia generalizarlos como cananeos y arameos. Sin embargo, sabemos que en
ciertas regiones del Levante si se autodenominaban cananeos.
FENICIOS Y ARAMEOS
Bajo estas premisas podemos hablar de dos grandes culturas la cananea–fenicia y la
amorrea–aramea.
Hay algunas diferencias regionales de lenguaje
entre ellas y se ha hecho una diferencia geográfica ubicando a la cultura
cananea-fenicia en la costa sirio libanesa y en Palestina y a la
amorrea-aramea en el interior es decir en el centro y norte de Siria. También
se considera a la cultura cananea más antigua que la aramea.
Considerando las variaciones regionales y a lo
largo de los tiempos, es posible decir que ambas culturas hablaban el mismo
idioma, tenían la misma organización social, política y la misma religión, lo
que hace prácticamente imposible diferenciarlas y más bien es posible
considerarlas expresiones de una misma civilización. La civilización del
Levante Mediterráneo.
Fenicios y arameos
son expresiones
de una misma
civilización
CONTINUIDAD
POBLACIONAL
Los cananeos representan la
población indígena del Levante, la gente que siempre ha residido en esa región
desde los tiempos de las primeras comunidades asentadas desde la prehistoria
remota (Tubb 1998).
Los amorreos o amoritas, son la población indígena
(desde el último tercio del tercer milenio) de Siria interior, central y norte,
así como los cananeos son del levante (costero y del sur). Los amoritas fueron
los antecesores de los arameos. La cultura aramea es el renacimiento y
resurgimiento de la población indígena. Los arameos pueden ser definidos como
la población del primer milenio (edad de hierro) de Siria central y norte (Tubb 1998).
CONTINUIDAD EN EL
TIEMPO
El Levante
Mediterráneo es una zona cultural bien definida y con
características propias. Al final de la prehistoria (3300 a.C.)
se observa ya una identidad cultural en el Levante y tiene una sorprendente
continuidad por más de tres mil años durante la Edad de Bronce (3,300 a 1,150
a.C.), la Edad de Hierro (1,150 a 332 a.C.) y hasta bien entrada la Época
Helénica (332 a 64 a.C.).
EL LEVANTE EN LA EDAD
DE HIERRO
Aunque se asientan nuevos grupos, como por ejemplo
egeos y árabes, estos se incorporan a la cultura local y la continuidad de la
organización política y cultural en el área continúa siendo la misma. Esto es
válido en toda la región del Levante. Debemos subrayar este punto pues con
respecto al sur, es decir a Palestina, hay una gran polémica ideológico -
política, sin embargo los investigadores actuales nos ofrecen un punto de vista
claro:
2
EL CASO DEL SUR DEL LEVANTE: PALESTINA
TRADICIONES
MILENARIAS
Con respecto a la permanencia de las tradiciones
fenicio cananeas en Palestina compartidas con el resto del Levante, Jonathan Tubb (1998) expone que:
“las tradiciones establecidas durante la Edad de
Bronce continuaron desarrollándose de manera fluida y obvia a lo largo de todo
el período de la Edad de Hierro y hasta muy entrada la época helenística.
Cerámica, herrería y la arquitectura doméstica, pública, religiosa y militar
todas muestran una continuidad esencial”.
CONTINUIDAD POLÍTICA
Con respecto a la continuidad política Emmanuel Pfoh (2004) escribe:
“Es necesario cuestionar la forma en que
tradicionalmente se han comprendido la historia y la naturaleza de las
organizaciones sociopolíticas de Palestina y ofrecer una perspectiva alternativa
y crítica. La continuidad en la Edad de Hierro II de una estructuración y una
práctica sociopolíticas ya presentes y bien conocidas durante los periodos
anteriores en la región y situándonos en el plano subyacente meramente de los
acontecimientos (sin interpretaciones religiosas o míticas) podríamos resumir
nuestra perspectiva en que (durante el primer milenio a.C.) no hay nada nuevo
bajo el sol… de la antigua Palestina”.
CONTINUIDAD CULTURAL
Con respecto a la continuidad cultural Carlos Wagner (1989) afirma que:
En el primer milenio a.C. “la Fenicia meridional
(del sur) y en contra del relato bíblico, permaneció aun durante mucho tiempo
enteramente fenicia. Hoy sabemos que toda Palestina permaneció culturalmente
vinculada al viejo sustrato cananeo-fenicio. La lengua fenicia continuó
hablándose durante siglos”.
PALESTINA SEGÚN LOS GRIEGOS
"Los fenicios
vivían en las costas de la Siria,
cuya región y todo lo
que hasta el Egipto se extiende
se llama
Palestina".
Heródoto
Historiador griego.
Siglo V a.C.
EL ANTIGUO ISRAEL EN PALESTINA
Con respecto a la
existencia del Antiguo Israel en Palestina, Blázquez y
Cabrero (2004) escriben:
“Los dos arqueólogos israelitas,
Israel Finkelstein y Neil Asher Silberman (2001), han escrito un libro,
resultado de sus excavaciones en Israel, que se refiere a la historicidad de
los libros del Antiguo Testamento. La existencia de los patriarcas del Éxodo, de
la presencia de los israelitas en el Sinaí, la conquista de Canaán y el periodo
de los jueces, no son hechos históricos. El imperio de David y Salomón no existió”.
ADECUANDO ARTIFICIALMENTE LA HISTORIA
Sin embargo estos autores
ahora dicen que debido a que en Palestina sólo se ha encontrado cultura
cananea, entonces los israelitas son cananeos. Esto significa que están definiendo
a unos israelitas que nada tienen que ver con los descritos en el Antiguo
Testamento y que fuera de este texto prácticamente no existe evidencia sólida
de su presencia en Palestina. Demuestran un afán por incluir, a como dé lugar,
a los antiguos israelitas en Palestina. Esto sólo es pontificar, es decir “presentar como innegables ideas, dogmas o
principios que están sujetos a examen” (RAE) o a serias dudas. La existencia
del Antiguo Israel en Palestina no está demostrado y prácticamente no hay evidencias
por lo que asegurar su existencia sólo es una imposición ideológica, un dogma
religioso y político.
LA FALTA DE HALLAZGOS GEOGRÁFICOS BÍBLICOS EN
PALESTINA
En el libro de Kamal Salibi (2007) se expone que:
“La geografía de
Palestina nunca ha correspondido de ninguna manera a las historias
aparentemente específicas en la Biblia” (contraportada).
“En el campo de la
arqueología bíblica y en su disciplina relacionada, la paleografía, hay una
amplia oportunidad no solo para el error, sino para perpetuarlo casi de manera
indefinida” (Salibi 2007).
ANTIGUO ISRAEL EN ASIR, ARABIA OCCIDENTAL
Salibi (2007) propone,
basado en un estudio toponímico y topográfico, que si existió el Antiguo Israel
descrito en la Biblia pero indica que no estuvo ubicado en Palestina sino en
Arabia Occidental, específicamente en la región de Asir.
INMIGRACIÓN ÁRABE A PALESTINA
Garbini (2008) y Pfoh
(2010) indican que la inmigración árabe en Palestina se observa ya desde el
siglo VIII a.C. Estos
inmigrantes provenían principalmente de caravaneros comerciantes que al mismo tiempo eran una fuerza militar. Debido
a la gran pobreza y desorden observable en Palestina en esta época (Tubb,
1988), estos grupos tomaron el poder en la región pero incorporando la cultura
local (Pfoh 2008). Se instalaron y tomaron como su primer centro de operaciones
el asentamiento que ahora conocemos como Jerusalén (Na’aman, 2007).
ONOMÁSTICA ÁRABE
Garbini (2008), señala que, en términos lingüísticos (y a
partir de la onomástica textual y epigráfica), “en la segunda mitad del siglo
VIII a.C. (750) el elemento étnico nor-arábigo constituía la casi totalidad de
la clase dirigente de Judá”. Garbini
2008: 144. En efecto, Garbini indica que “la
onomástica de Judá en el siglo VIII a.C., la más antigua que poseemos, está
constituida en buena parte de raíces extrañas a la onomástica fenicia y a la
aramea, pero que encontramos más o menos ampliamente en la norarábiga. Nombres como Ahaz, Amasías, Asaf, Elquías, Eliaquín,
Ezequías, Ezequiel, Josías, Isaías, Oseas y Sebna […] tienen correspondencia
tanto con la onomástica nor-arábiga como en la amonita, cuya población era
nor-arábiga pero que utilizaba el
fenicio como lengua escrita” (2008: 143). Cf. también Garbini 2006:
247-251.
EL REINO DE JUDÁ
No sabemos desde cuando la
región comenzó a llamarse Judá y a sus habitantes judíos, si desde la llegada
de los inmigrantes árabes (siglos VIII o VII a.C.) o desde el gobierno de Judas
Macabeo (siglo II a.C.). Sin embargo, la región se conocía como Palestina, en
esa misma época, por los asirios, persas y griegos.
LOS ASMONEOS (Hasmoneos)
Los asmoneos fueron los dirigentes
del reino de Judá en el segundo siglo a.C. Vale la pena señalar que la clase
dirigente, política, sacerdotal y militar, podría haber sido de origen árabe y
la población de la ciudades y del campo de origen fenicio y arameo.
EL CAMBIO CULTURAL Y EL INICIO DE LA CONFUSIÓN
De acuerdo con Salibi
(2007) fue en la época helénica en donde los asmoneos, un grupo de dirigentes y
sacerdotes que reinaron en el área desde 167 a.C. hasta 63 a.C. (100 años), se proclamaron
como herederos del antiguo Israel.
“Con los Asmoneos comenzó
a identificarse a Palestina como la tierra original de Israel y todos los
conceptos geográficos relacionados se trasladaron a tierras más al norte, es
decir a Mesopotamia, Siria (incluyendo Palestina) y Egipto en lugar de Arabia
occidental” (Salibi 2007).
Considerando los
señalamientos de Pfoh y de Garbini podemos decir que esta clase dirigente provenía
de inmigrantes de Arabia y que trasladaron su historia y su identidad israelita
desde Arabia a Palestina.
Las referencias
originales de esta historia y su relación con Arabia Occidental, las perdieron
los inmigrantes árabes a Palestina posiblemente debido al distanciamiento con
el lugar de origen por los bloqueos generados por las conquistas sucesivas
asirias, persas y helénicas.
LAS CONQUISTAS DE LOS ASMONEOS
El mapa de Palestina con
los nombres de las doce tribus de Israel fue sobrepuesto a partir de
tradiciones de la Arabia occidental. El área que se señala y que aparece en la
Biblia como los reinos de David y Salomón más bien corresponde a las conquistas
de los asmoneos sobre pueblos de la región como los llamados samaritanos,
galileos y edumeos. Sin embargo al menos los dos primeros, que eran fenicios y
arameos, estuvieron en resistencia y conflicto continuo contra los asmoneos que
los integraron a Judá.
JERUSALÉN
Los inmigrantes y
gobernantes árabes llamaron a la capital de su reino Jerusalén en referencia a
una localidad de Arabia occidental (Al Sharim). A esta ciudad los pueblos
aledaños no la conocían como Jerusalén sino como Ailiya (significa fortaleza),
(Salibi 2007). De esa manera otros asentamientos también fueron renombrados.
JUDEA Y PALESTINA EN LA ÉPOCA ROMANA
En el año 37 a.C. los
romanos reorganizaron el territorio con el nombre de Judea con capital en Jerusalén.
Más adelante en 70 d.C. renombraron el territorio recuperando su nombre
tradicional de Palestina y a Jerusalén se le llamo Aelia Capitolina, derivado
del antiguo nombre de la ciudad.
EL IMPACTO DE LA BIBLIA
Durante el reino helénico
de los Ptolomeos se hizo en la biblioteca de Alejandría en Egipto, una
recopilación de historias de la región, reuniendo información de diversos
orígenes geográficos, temporales y culturales y se conformó un documento
escrito en griego conocido como la Septuaginta o la Setenta (280 a.C.), que fue
el antecedente de la Biblia. Este documento que ya tenía al menos 150 años
circulando, fue modificado por los asmoneos incorporando sus conceptos que
finalmente quedaron plasmados en lo que conocemos como el Antiguo Testamento de
la Biblia, las modificaciones continuaron realizándose al menos hasta el
segundo siglo d.C. Debido al gran impacto que ha tenido la Biblia, y en este
caso el Antiguo Testamento, sobre el imaginario colectivo estos conceptos
erróneos se han perpetuado por más de dos mil años.
CAUTELA EN LAS AFIRMACIONES
Esto fortalece la afirmación
de que asegurar la existencia del Antiguo Israel en Palestina está más que en
duda y no puede exponerse como una verdad histórica. Israel sólo ha existido en
Palestina desde 1948, por lo que llamar Israel a Palestina antes de esa fecha es
una falacia y la perpetuación de un gran error defendido actualmente por
razones religiosas y políticas.
CONCLUSIÓN
EL ANTIGUO ISRAEL NO TIENE SUSTENTO EN PALESTINA
Debido a la falta o a
dudosas evidencias, arqueológicas, antropológicas, históricas y sociales, no es
adecuado suponer la existencia del Antiguo Israel en Palestina.
BIBLIOGRAFÍA
Blázquez, José Maria; Cabrero, J. 2004
La Arqueología israelita y la
historicidad de los libros el Antiguo Testamento.
Antigua Historia y Arqueología de las Civilizaciones (Web)
Taller Digital de la Universidad de Alicante. Facultad de Filosofía y Letras. https://docs.google.com/file/d/0B-eM3ikG00KrNmpjendiS1FSYkdkSTZJamJ2OW85dw/edit
Publicado
previamente en: Boletín de la Asociación Española de Orientalistas 40, pp. 17
-57.
Finkelstein, Israel; Silberman, Neil Asher. 2001
The Bible Unearthed: Archaeology's New Vision
of Ancient Israel and the Origin of Its Sacred Texts. New York, Free Press.
Garbini, G.
2006
Intoduzione
all’epigraphia semítica.
Studi sul Vicino Oriente antico, Vol. 2. Brescia, Paideia.
Garbini, G.
2008
Scrivere la
storia d’Israele. Vicende e memoire ebraiche.
Biblioteca di
historia e storiografia dei tempi biblici Vol.15 Brescia, Paideia.
Na’aman, N.
2007
When and how
did Jerusalem Become a Great City?
En: Bulletin of the American Schools or Oriental research 347, pp .21
-56
Pfoh, Emmanuel. 2004
De patrones y clientes: sobre la
continuidad de las prácticas sociopolíticas en la antigua Palestina.
Cuadernos del Centro de Estudios de Historia del Antiguo Oriente. Vol 2.
P 71.
Pontificia Universidad Católica Argentina.
Facultad de Filosofía y Letras.
Pfoh, Emanuel. 2010
La conexión
árabe: una hipótesis sobre el surgimiento sociopolítico de Israel en Palestina.
Antiguo Oriente:
Cuadernos del Centro de Estudios de Historia del Antiguo Oriente Vol 8.
Pfoh, Emmanuel. 2014
Geografías imaginadas, práctica arqueológica y
construcción nacional en Israel/Palestina.
Cuadernos
de Antropología Social, N 39, pp. 39 -62, 2014.
Salibi, Kamal.
2007
The Bible Came
From Arabia.
Naufal Group (1985), second printing 2007.
Beirut, Lebanon.
Tubb, Jonathan. 1998
Cannanites. Peoples of the past.
University of Oklahoma Press.
Wagner, Carlos G. 1989
Los fenicios.
Tomo IX de la Colección Historia del Mundo Antiguo: Oriente. Ediciones
Akal, S.A. Madrid, España. I.S.B.N.: 84-7600-274-2 (Obra completa). I.S.B.N.:
84-7600-332-3 (Tomo IX, 62 p.p.)